El humo de los versos inunda con su aroma de café en su tinta, traza estrofas de rima libre o es como poesía en prosa que espera ser bebida. La viruta se retuerce como el humo de un fuego pasado. Una bala perdida, pieza extraña para un coleccionista de objetos azarosos, improbables, como los poemas de esta plaquette que atraviesan lápices, cuadernos, libretas y efectos personales, porque estos son un cuchillo clavado entre el sueño y la vigilia, tienen la culpa de un cazador y la hoja bañada de sangre de poesía nocturna, porque un cuchillo jamás es inocente.